Esta ruta parte de la capital de la provincia guipuzcoana, San Sebastián. Nos llevará al valle del Urola, desde su desembocadura en el mar Cantábrico, en Zumaia, hasta el fértil valle de Azpeitia y Azkoitia.
Nuestro camino transcurrirá por verdes paisajes, bordeando el río Urola. Buscaremos de los vestigios históricos de uno de los santos españoles más universales: San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús.
El punto culminante de nuestro deambular es la basílica de Loyola, a medio camino de Azpeitia y Azkoitia, un gran complejo religioso de estilo barroco. Pero antes nos dejaremos maravillar por localidades tan pintorescas como Zumaia, frente al mar. O Zestoa, un pequeño municipio conocido por la fama de su hotel balneario.
ZUMAIA, la villa de Zuloaga
En la villa de Zumaia, ubicada sobre la desembocadura del río Urola, el visitante se encuentra en una plaza llena de historia. Su actividad pesquera y de fabricación de embarcaciones se remonta al siglo XIV.
Parajes de llamativa naturaleza son Punta Iruarriaundieta, Punta Izustarri, las islas de Bedua o lamarisma de Santiago, junto a la playa de Itzurun o San Telmo -donde se puede aprovechar también para ver la ermita del mismo nombre-. Su orografía litoral es recortada y se caracteriza por impresionantes acantilados.
Si hay que señalar alguna construcción de su núcleo urbano esta es, sin duda, la iglesia de San Pedro, que posee aspecto de palacio-fortaleza y que data entre los siglos XIII y XVI. A pesar de todo, Zumaia es conocida sobre todo por la casa-museo del pintor Zuloaga, donde se pueden contemplar algunas de sus obras más significativas.
ZESTOA, paraíso termal
Zestoa es un pequeño municipio de algo más de tres mil habitantes situado a orillas del Urola. Alrededor del centro municipal encontraremos pequeños barrios y caseríos a los pies de las montañas o en los muchos valles de la zona.
El beneficioso efecto de sus aguas termales, descubiertas en 1774, alentó a finales del siglo XIX el nacimiento de una incipiente infraestructura turística para acoger a los miles de visitantes que llegaban a la ciudad.
Así nació el hotel balneario de Cestona en 1893. Uno de los más importantes del País Vasco y el único de los once con que llegó acontar la provincia de Guipúzcoa.
AZPEITIA, cuna de San Ignacio de Lozoya
Azpeitia es una encantadora localidad del centro de Guipúzcoa donde se conservan más de 350 caseríos (casa rural típica) dispersos por su geografía.
Cuenta el municipio con multitud de edificios de interés como, por ejemplo, diversas casas señoriales, ermitas, conventos o palacios. Pero su principal atractivo monumental es el conjunto de edificios relacionados con San Ignacio de Loyola.
Destaca, entre todos ellos, la basílica de Loyola. Un gran complejo religioso de época barroca que fue construido junto a la casa natal del santo y adonde peregrinan con devoción miles de fervientes devotos del fundador de la Compañía de Jesús.
Rodeada de una amplia extensión de arbolado y jardines. Esta magnífica edificación es obra de un discípulo de Bernini y merece una sosegada visita por parte del viajero.
AZKOITIA, ciudad señorial
Azkoitia, situado también en el valle del Urola, está rodeado por altas montañas. Entre las que destacan el monte Izarraitz (942 m) y el Irumugarri (939 m).
Este municipio cuenta con numerosos atractivos monumentales: diversos palacios y casas señoriales, como el palacio de Insausti, construido a mediados del siglo XVIII y de estilo barroco; iglesias y ermitas, como la parroquia de Santa María la Real, gótica y donde se guardan obras artísticas de gran valor (órgano, retablo, tallas y pinturas); y bellas plazas, como la plaza Mayor, un amplio recinto fortificado del siglo XVIII.
Didactica ruta del norte. Eskerrik asko